Este blog fue escrito con la amable colaboración de Adunola Bello y Ana Moreno Merino, pasantes en el Centre for International Development (Centro para el Desarrollo Internacional) de la Universidad de Northumbria.
En noviembre de 2022, varios productos creativos producidos por las participantes de RECLAMA se mostraron en el Reino Unido por primera vez. Entre el 12 y el 22 de noviembre, se presentó una exposición en el café de cine Star and Shadow, Newcastle upon Tyne. El 16 de noviembre, también se llevó a cabo una proyección de una película, mostrando un documentalsobre prácticas espirituales, creado por mujeres afroecuatorianas involucradas en el proyecto, seguido de una sesión de preguntas y respuestas con la socia del proyecto Juana Francis Bone, cofundadora del colectivo Mujeres de Asfalto, y Genesis Castillo y Rosa Tejada, investigadoras pares de RECLAMA.
El evento contó con una gran asistencia de un público interesado, y fue iniciado por una introducción a RECLAMA y el documental, que se centró en las prácticas tradicionales y religiosas ejercidas por los residentes de Wimbí, Esmeraldas; especialmente las mujeres afroecuatorianas. Antes de proyectar el documental (que ahora también se puede ver en la página web de RECLAMA), Juana Francis Bone pidió a la audiencia que prestara atención especial a los silencios, las voces de las mujeres y el impacto de la atmósfera en las comunidades.
La grabación del documental tuvo lugar durante la Semana Santa, incluyendo el Domingo de Pascua. Como resultado, el documental incluye una recreación de la muerte, sepultura y resurrección de Jesucristo. Las mujeres involucradas en el documental explicaron la importancia de las actividades colectivas y los sentimientos de alegría y tristeza durante este período festivo, explicando que crea un sentido de unión y unidad en la comunidad. Según las mujeres afroecuatorianas, estas creencias y tradiciones les fueron transmitidas a ellas por sus antepasados y deben ser transmitidas y adoptadas por generaciones futuras.
Las mujeres afroecuatorianas también afirmaron cómo estar apegadas a su ascendencia mantiene a la comunidad y ayuda continuamente a revivir su memoria espiritual. Además, les ayuda a formar resistencia contra la extracción de plantaciones de aceite de palma y la minería de oro que amenazan los medios de vida de la población local y resultan en la degradación ecológica. Según las mujeres afroecuatorianas, "hablar de resistencia y espiritualidad es reconocer el poder de la memoria colectiva."
La proyección de la película fue seguida por una sesión de preguntas y respuestas, y muchos en la audiencia aprovecharon la oportunidad para hacer preguntas directamente a Juana Francis Bone, miembro del equipo de RECLAMA, y a las investigadoras pares, Genesis Castillo y Rosa Tejada. Contaron que RECLAMA les había permitido representarse y expresarse, y que apreciaron el hecho de que las narrativas de su herencia y cultura fueran explicadas y creadas por ellas mismas, en lugar de por otros. Esto también fue elogiado por uno de los miembros de la audiencia, quien explicó:
"Es bastante impresionante que el evento fuera en el idioma nativo de los participantes, y esto ayudó a evitar tantas interpretaciones erróneas del conocimiento que ocurren cuando un idioma tiene que ser traducido a uno diferente. Esto se debe a que cuando se trata de espiritualidad y patrimonio cultural, hay ciertas cosas que nunca se pueden traducir y entender fuera del contexto en el que suceden. También me gusta el hecho de que las personas de color son las que toman la iniciativa en las conversaciones sobre las personas de color, porque de esa manera, pueden expresar sus historias de la manera que quieran narrarlas. Verlo en una película es mejor que leer un PDF o escuchar un podcast, porque hay ciertos aspectos visuales de la película que nos hicieron apreciar el contexto más de lo que podríamos haberlo apreciado de otra manera."
La investigadora Genesis Castillo explicó:
“[RECLAMA] Incentiva a que los jóvenes, sobre todo, que muchas veces estábamos dejando atrás, toda esa parte de nuestras ancestras, podamos rescatarlo, no rescatarlo porque se rescata lo que está perdido y esto no está perdido, podemos importar, fomentar, cada una de nuestras costumbres, los sigualdos, los arrullos, considerando que son cantos.”
Además, el proyecto fue aplaudido por las mujeres ecuatorianas por la vía que les dio para estar orgullosas de su identidad tanto en privado como en público. Esto ha estado en el corazón de las iniciativas de etnoeducación en las que se está trabajando actualmente en Ecuador, algo en lo que la investigadora Rosa Tejada ha estado involucrada durante mucho tiempo. Explicó que ha participado en mesas sobre etnoeducación en su provincia y ha tenido conversaciones más amplias para mejorar el nivel de comprensión que tiene sobre su patrimonio y cultura, y para garantizar el paso continuo de estas tradiciones a la próxima generación:
“Debemos entregar este conocimiento a nuestros alumnos desde las aulas, para que ellos se vayan empoderando, porque nosotras partimos de este mundo y no nos podemos llevar ese conocimiento. Debemos entregar este conocimiento a las presentes generaciones, prepararlas ahora, para que ellas seas las portavoces de futuras generaciones.”
Juana Francis Bone explicó la creciente crisis en curso en Esmeraldas, en términos de inseguridad, que representa una amenaza para el sentido de unión y memoria colectiva de la comunidad y se ve como una segunda pandemia (una pandemia de violencia):
“Estamos en una crisis muy grande en Ecuador [...] y para nosotras, el tema de la memoria colectica es como un salvavidas comunitario. Políticamente hablar de memoria en nuestras comunidades es sostener una memoria de resistencia, que en estos momentos parece el exterminio del territorio, entonces, políticamente es fundamental.”
Como un paso hacia el avance en el futuro, se enfatizó y reconoció la importancia de la oralidad y la puesta en primer plano de las narrativas y la cultura oral de las mujeres afroecuatorianas como claves para resistir el extractivismo y defender los territorios. Al final de la sesión de preguntas y respuestas, Rosa compartió un poema y una canción con el público entre aplausos entusiastas.
Después de la sesión de preguntas y respuestas, los asistentes tuvieron la oportunidad de ver la exposición en el café Star and Shadow y charlar con los miembros del equipo de RECLAMA con sede en el Reino Unido. En breves entrevistas con los asistentes, éstos revelaron que muchos estaban fascinados por el patrimonio cultural de las mujeres afroecuatorianas, y estaban felices de haber aprendido algo nuevo sobre una cultura diferente con la que no habían estado familiarizados antes del evento:
"El evento fue bueno, fue genial haber podido ver a las mujeres afroecuatorianas y aprender lo que han estado haciendo, y escuchar sus propias palabras sobre las mujeres afroecuatorianas porque en el mundo académico hay muchas representaciones. He estado en América Latina, pero nunca he oído hablar de los afroecuatorianos, así que esto era nuevo para mí. Creo que las mujeres son vistas como las personas que cuidan, y si las mujeres tuvieran una voz más fuerte en la comunidad, la violencia disminuiría. Además, debe haber una buena conclusión sobre el empoderamiento de las mujeres en estas comunidades, y al hacerlo, tal vez se puedan frenar los problemas de deforestación y minería."
Esperamos que esta proyección de la película haya estimulado un mayor interés por investigar y aprender más sobre las mujeres afroecuatorianas, reforzando uno de los objetivos principales del proyecto RECLAMA, aumentar la visibilidad de las mujeres afrodescendientes y negras marginadas y crear vías para la transmisión de su vibrante patrimonio cultural. Otro asistente explicó que:
"Creo que el evento estuvo bien organizado, y me alegro de que hubiera tanta gente en la audiencia, y el evento se centró en asuntos realmente importantes; interseccionalidad, género, descolonización delestudio de partes del Ecuador, y se hizo de una manera bastante artística, es una combinación de la historia oral y visual. Aprendí sobre un tipo diferente de espiritualidad, y fue muy interesante cuando Rosa explicó que no se trata solo de la comunidad afroecuatoriana, sino también del empoderamiento del resto de la comunidad ecuatoriana. El poema y la canción fueron absolutamente increíbles. El evento ha cambiado mi perspectiva en términos de cultura porque no se ve una representación de las mujeres afroecuatorianas ni en la música ni en las películas, y definitivamente necesitamos asegurarnos de que sean escuchadas y vistas, y tengo la esperanza de ver qué sigue y que este es un punto de partida de algo más grande."
Si estás interesado en los resultados creativos del proyecto RECLAMA, muchos de ellos ahora están subidos a nuestra página web. ¿Estás interesado en asistir a un evento de RECLAMA? ¡Esté atento a esta página y síganos en Twitter y Facebook para conocer nuestras actividades públicas en el Reino Unido y más allá en 2023!